DECRETO 200/1997, de 9 de octubre, por el que se aprueba el III Plan Regional sobre Drogas de Castilla y León.

SecciónII - Disposiciones Generales
EmisorConsejeria de Sanidad y Bienestar Social
Rango de LeyDecreto

Fecha del Boletín: 13-10-1997 Nº Boletín: 196 / 1997

DECRETO 200/1997, de 9 de octubre, por el que se aprueba el III Plan Regional sobre Drogas de Castilla y León.

La Ley 3/1994, de 29 de marzo, de Prevención, Asistencia e Integración Social de Drogodependientes de Castilla y León, dispone en su artículo 29 que el Plan Regional sobre Drogas es el instrumento estratégico para la planificación y ordenación de las actuaciones que en materia de drogas se lleva a cabo en Castilla y León.

Igualmente, la citada Ley en su artículo 31 establece que corresponde a la Consejería de Sanidad y Bienestar Social la elaboración del Plan, debiendo ser aprobado por la Junta de Castilla yleón.

En la elaboración del III Plan Regional sobre Drogas de Castilla y León se han tenido en cuenta las prioridades marcadas en la Ley 3/1994, la evaluación y la experiencia acumulada en el desarrollo de los dos Planes anteriores (Decretos 252/1988, de 29 de diciembre, y 358/1991, de 26 de diciembre) y las nuevas vertientes que presenta el fenómeno del uso indebido de drogas en la actualidad en Castilla y León. Asimismo en la redacción del Plan se han incorporado propuestas de las Administraciones Públicas, entidades privadas e instituciones que se encuentran vinculadas al mismo.

Por todo ello, en virtud de lo dispuesto en la Disposición Final Primera de la referida Ley 3/1994, oído el Consejo Asesor en materia de drogodependencias, y a propuesta del Consejero de Sanidad y Bienestar Social, previa deliberación de la Junta de Castilla y León en su reunión de 9 de octubre de 1997

DISPONGO:

Art. 1 º Se aprueba el IIIPlan Regional sobre Drogas de Castilla y León, cuyos contenidos, conforme a lo dispuesto en el artículo 30 de la Ley 3/1994, de 29 de marzo, de Prevención, Asistencia e Integración Social de Drogodependientes de Castilla y León, se recogen en el Anexo I al presente Decreto.
Art. 2 º El III Plan Regional sobre Drogas de Castilla y León estará en vigor en el periodo comprendido entre los años 1997 y 2000, siendo vinculante para todas las Administraciones Públicas y entidades privadas e instituciones que desarrollen actuaciones en materia de drogodependencias en Castilla y León.
Art. 3 º Los objetivos, actuaciones y demás contenidos del IIIPlan Regional sobre Drogas deberán ser actualizados, con las modificaciones o ampliaciones que en su caso proceda, de acuerdo con los resultados obtenidos de su evaluación.
DISPOSICION DEROGATORIA UNICA

Queda derogado el Decreto 358/1991, de 26 de diciembre, por el que se aprobaba el II Plan Sectorial sobre Drogas de Castilla y León.

DISPOSICIONES FINALES

Primera. Se autoriza al Consejero de Sanidad y Bienestar Social para dictar las normas necesarias para el desarrollo y ejecución de este Decreto.

Segunda. El presente Decreto entrará en vigor al día siguiente de su publicación en el «Boletín Oficial de Castilla y León».

Valladolid, 9 de octubre de 1997.

El Presidente de la Junta de Castilla y León,

Fdo.: JUAN JOSE LUCAS JIMENEZ

El Consejero de Sanidad y Bienestar Social,

Fdo.:JOSE MANUEL FERNANDEZ SANTIAGO

ANEXO I

III PLAN REGIONAL SOBRE DROGAS DE CASTILLA Y LEON

CAPITULO I

El consumo de drogas en Castilla y León:Análisis de situación

El consumo de drogas es un fenómeno antiguo, que ha adquirido una enorme importancia en la última mitad del siglo XX, debido tanto a su extensión, aumento y diversificación de las sustancias empleadas, como a las implicaciones sanitarias y sociales que ha acarreado.

Se definen como drogas las sustancias con efectos psicoactivos capaces de generar abuso o dependencia. De acuerdo con la Ley 3/1994 de 29 de marzo, de Prevención, Asistencia e Integración Social de Drogodependientes de Castilla y León, se consideran drogas las bebidas alcohólicas, el tabaco y las sustancias estupefacientes y psicotrópicas que tienen este potencial.

En la sociedad occidental de nuestros días se da una situación paradójica respecto al consumo de drogas, de manera que existe una escasa sensibilidad y buena aceptación social del consumo de alcohol y tabaco, que son las sustancias más utilizadas y que generan mayores problemas de salud pública, mientras que se ha despertado una gran concienciación e incluso alarma social ante el consumo de las drogas no institucionalizadas. Esta situación se explica porque aunque el uso de estas últimas drogas se extiende a grupos reducidos de población, su comercio ilegal ha generado importantes problemas de orden social, incluyendo delincuencia y criminalidad, además de los de salud. Esta situación ambivalente, mantenida durante largas décadas, parece irse modificando poco a poco desde el comienzo de los años noventa, con un aumento progresivo de la sensibilización social por los problemas que ocasiona el consumo de alcohol y tabaco y una progresiva normalización de la percepción de las implicaciones relacionadas con el consumo de otras drogas.

En Castilla y León, al igual que ocurre en otras Comunidades Autónomas de España y en el resto de los países europeos, el consumo de drogas y las drogodependencias representan un problema social y de salud pública de primera magnitud. Como notas características generales, se puede destacar que el consumo de las denominadas drogas institucionalizadas es algo mayor en esta Comunidad que el promedio de España, mientras que el de drogas ilegales o no institucionalizadas no alcanza en nuestra Comunidad la extensión que tiene en otras zonas.

  1. Drogas institucionalizadas.

    El alcohol y el tabaco son las dos drogas más consumidas en Castilla y León. También son las que generan más problemas de salud, en términos de morbilidad y mortalidad, ocasionan un enorme coste económico tanto en asistencia sanitaria como en pérdida de productividad laboral y, en el caso particular del alcohol, está en el origen de importantes problemas de tipo social.

    ALCOHOL

    El consumo de bebidas alcohólicas, fundamentalmente vino, es una práctica muy arraigada en la cultura mediterránea. España ocupa el tercer lugar en producción mundial de vino, detrás de Italia y Francia y también un lugar destacado en consumo de alcohol a escala internacional. El consumo de bebidas alcohólicas en España a experimentado un crecimiento notable y sostenido desde los años 40, si bien ha variado el patrón de consumo. Así, el consumo de vino a disminuido de 229 g. por persona y día en 1940 a 150 g. en 1987, mientras que el consumo de cerveza se mantuvo bajo y estable hasta comienzos de los años 60, en que comienza a ascender hasta alcanzar unos 180 g./persona/día en 1987. El consumo de bebidas destiladas sufrió un discreto aumento a finales de los años 70 y se mantiene estable desde entonces en unos 20 g./persona/día. Actualmente el consumo medio de alcohol de la población adulta española es de unos 30 g. de alcohol absoluto por persona y día, que dado el diferente contenido de alcohol de las diversas bebidas, sigue procediendo principalmente del vino (unos 15 g./persona/día).

    Dado que los mayores perjuicios que ocasiona el alcohol, no sólo en el plano físico, sino también en el psicológico y social, derivan del consumo excesivo, el Plan Regional sobre Drogas de Castilla y León centra su interés en el consumo problemático de bebidas alcohólicas, en concordancia con el Plan Europeo de Actuación sobre el consumo de alcohol que propugna en relación con el uso de bebidas alcohólicas «cuanto menos mejor».

    Los principales problemas y enfermedades que ocasiona el consumo excesivo de alcohol son cirrosis hepática, cáncer digestivo y de otras localizaciones, hipertensión arterial, neumonía, cardiomiopatía, accidentes de tráfico, accidentes laborales y suicidio. Además provoca un gran absentismo y disminución del rendimiento laboral, situaciones de violencia y malos tratos en el ámbito doméstico, así como problemas afectivos, familiares y sociales. Así mismo, ocasiona numerosos problemas tangibles, pero difíciles de cuantificar como el dolor y sufrimiento que padecen el alcohólico y su familia.

    El consumo de alcohol en Castilla y León ha experimentado una tendencia ascendente a lo largo del tiempo. Según los resultados de las encuestas sobre consumo de drogas en Castilla y León, el porcentaje de adultos que refiere un consumo excesivo (más de 100 cc. de alcohol puro al día) ha pasado de un 3, 0% en 1989 a 4, 2% en 1992. Otras encuestas realizadas en el ámbito español también reflejan esta tendencia y sitúan a Castilla y León en un consumo ligeramente por encima del promedio de España.

    La proporción de bebedores excesivos es mayor entre los varones (6, 8% frente a un 1, 7% de las mujeres) y en los grupos de edad comprendidos entre los 20 y los 49 años. En cuanto al nivel socioeconómico, la encuesta de Castilla y León de 1992 muestra una polarización del consumo, con mayor prevalencia de bebedores excesivos en los extremos...

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